«No vamos a ceder a chantajes» ha afirmado esta mañana José Vía, Secretario de Acción Sindical Federal de USO, sindicato que mantiene su postura de no firmar el acuerdo presentado por la dirección, al considerar que la empresa plantea cuestiones ajenas a la negociación colectiva. El portavoz de USO en la fábrica, Justino Sánchez, ha indicado que únicamente se firmará un acuerdo laboral y no cuestiones que «exculpan a Blas Mezquita y su equipo de responsabilidades en su gestión».
La dirección de Sniace anunció el viernes que no firmará el preacuerdo pactado y ratificado el miércoles por la asamblea de trabajadores, debido a que la mayoría de los afiliados al sindicato USO han rechazado el texto y sólo aceptan la parte laboral. Para la empresa la unanimidad sindical es necesaria -UGT, CCO y SU lo aceptan en su totalidad- como «garantía» ante la Junta de Acreedores, los administradores concursales y el futuro inversor que se espera ayude a reabrir las fábricas de Sniace.
USO mantiene su postura pues considera que posibles demandas de responsabilidad en la gestión se verían bloqueadas si se firma el acuerdo. La vía jurídica va por otro lado, y USO mantiene las demandas planteadas ante los tribunales por los despidos.
Vía ha exigido que la dirección de Sniace presente un plan «industrial serio» donde se contemple la fecha del inicio de la actividad, de dónde va a salir el dinero para la financiación del plan laboral y puesta en marcha de factoría, si hay un posible inversor y cómo van los panes de recalificación de los terrenos excedentes.
Tampoco entiende USO que la empresa demande unanimidad para la firma del acuerdo que ha presentado a los trabajadores, y que el resto de sindicatos apoya, cuando tal petición «no tiene encaje legal». Sánchez ha explicado que en las negociaciones laborales se exige mayoría no unanimidad para aplicar los acuerdos. «La unanimidad no se requiere ni para cambiar la Constitución».
«La dirección de Sniace tiene que asumir sus propias responsabilidades, entre ellas la de su gestión empresarial pasada y presente», ha recalcado el portavoz federal. Vía ha advertido a Mezquita y su equipo que «no deben esconderse detrás de los propios trabajadores aprovechando la débil situación de la plantilla tras un año en el paro y la empresa sin actividad».
El preacuerdo, que ha sido respaldado por UGT, CC.OO y SU, incluye un convenio de seis años de duración, con tres de congelación salarial y otros tres con una subida del 0,5 % sobre el IPC, la reapertura de las plantas con 326 empleados, prejubilaciones, bajas indemnizadas y una bolsa de empleo para los relevistas a quienes no se renueve el contrato.
Además, prevé la prejubilación de 67 empleados mayores de 58 años mediante un plan de rentas, a los que se añadirán otros 35 mayores de 61 años que lo harán percibiendo una indemnización de 20 días por año trabajado.
También recoge la jubilación definitiva de los 63 empleados relevistas a tiempo parcial a medida que vayan alcanzado los 65 años, así como la no renovación a los 42 operarios con contrato relevo, que irán a una bolsa de empleo para incorporarse a Sniace cuando haya bajas.
La Sección Sindical de USO Sniace y la Federación Estatal de Industria quieren trasmitir a los trabajadores de Sniace en particular y a la opinión pública en general lo siguiente:
1. El sindicato USO asume, como siempre ha hecho, su responsabilidad en Sniace y por eso mismo sus afiliados han aprobado en urna suscribir un acuerdo laboral, similar al propuesto por este sindicato hace un año, que fue rechazado entonces por los 3 sindicatos que ahora lo consideran histórico, en el ámbito de sus competencias sindicales.
2. En el mismo sentido, la dirección de Sniace tiene que asumir sus propias responsabilidades, entre ellas la de su gestión empresarial pasada y presente. Blas Mezquita y su equipo gestor no deben esconderse detrás de los propios trabajadores aprovechando, la débil situación de la plantilla tras un año en el paro y la empresa sin actividad.
3. Pretender meter, de rondón y bajo presión, dentro de un acuerdo laboral, cláusulas y valoraciones interesadas que nada tienen que ver con la negociación colectiva, es un chantaje y un ejercicio de abuso empresarial. Afortunadamente España es un estado de derecho, donde los acuerdos adquieren su plena validez cuando son adoptados por las mayorías que la legislación correspondiente determina.
El derecho laboral y concursal fijan las mayorías para las tomas de acuerdos en mayoría simple o cualificada. NUNCA POR UNANIMIDAD.
No son los sindicatos ni los trabajadores quienes deban determinar, ni servir de coartada, ni dar salvoconductos para eximir de responsabilidad en la gestión empresarial a la dirección de la compañía.
4. La reapertura de la empresa sólo se logrará si se convence a los acreedores de que se tiene un plan industrial y financiero serio, algo que hoy es una incógnita que no ha sido despejada por Blas Mezquita y su equipo gestor durante las 25 reuniones llevadas a cabo entre empresa y comité este año y donde la USO le hemos venido requiriendo pertinazmente.
Si hay inicio de actividad industrial, la paz social y el compromiso de los trabajadores para los próximos años, que dé confianza a los acreedores e inversores, está garantizada, esto sí, de manera UNANIME por todos los sindicatos y trabajadores de Sniace.
5. La Federación de Industria de USO requiere de Sniace la presentación inmediata (NEGRO SOBRE BLANCO) de:
· UN PLAN INDUSTRIAL.
· LA FINANCIACION DEL PLAN INDUSTRIAL Y PLAN LABORAL
· FECHA CONCRETA DE INICIO DE LA ACTIVIDAD INDUSTRIA
