Desde la FI-USO y durante las asambleas realizadas en el mes de marzo por la sección sindical, se ha ido informando sobre la política sancionadora de CELSA, que convierte en culpables a los trabajadores que sufren incidentes o accidentes involuntarios de forma automática, sin asumir la empresa su parte de responsabilidad, ha sido llevada a los juzgados por nuestra sección sindical. Eso sí, en solitario, ya que los que se comprometieron en aquellas asambleas ante los trabajadores a apoyar las acciones necesarias para acabar con estas prácticas y limpiar los expedientes de los trabajadores afectados, prefirieron pactar individualmente aminoraciones de las penas a cambio de reconocer la culpabilidad de los trabajadores.
En el caso que nos ocupa, acudimos a los juzgados, y allí la autoridad pertinente nos ha dado la razón a los trabajadores. No entraremos a detallar todas las artimañas empleadas por la empresa para retorcer las investigaciones de accidentes en favor de su tesis sancionadora, pero debemos dejar claro que, tal y como sentencia en el caso del compañero de Aceria que hemos llevado a juicio: “El actor no cometió desidia ni negligencia, sino un descuido o error de apreciación”. Por ello, revoca la sanción, dejando el expediente de nuestro compañero limpio y deja la sanción sin efecto.
No es la primera vez que debemos ir a juicio por culpa de la política de empresa sobre sanciones, y en todas las ocasiones, la empresa ha perdido los juicios. Parece inexplicable que aún no hayan asumido que tienen responsabilidades en la seguridad más allá de la mera sanción a los trabajadores involucrados.
Desde FI-USO, queremos aprovechar esta ocasión para recordar a todos los trabajadores, que trás las nuevas investigaciones impuestas por la empresa, en que no se convoca a sus delegados sindicales a las mismas, están en su derecho de exigir la presencia de su delegado sindical y negarse a participar en ellas sin la presencia del mismo. Porque en estos tiempos que corren en CELSA: “todo lo que digas podrá y será utilizado en tu contra”. Los hechos hablan por si mismos.