Este lunes 16 de septiembre marcará un antes y un después en las relaciones laborales y sindicales en la empresa láctea Kalise, con presencia en Las Palmas, Tenerife, Lanzarote y Fuerteventura.
En un abuso empresarial sin precedentes, la empresa Kalise ha adoptado unilateralmente medidas disciplinarias contra sus trabajadores, miembros del Comité de Empresa, y el Delegado Sindical de USO, que a su vez formaban parte de la Comisión Negociadora y del Comité de Huelga. El resultado:
- 3 delegados del Comité de Empresa, despedidos. Entre ellos el Presidente del Comité.
- 4 delegados del Comité de Empresa, sancionados con 60 días de empleo y sueldo.
- El delegado sindical, sancionado con 15 días de empleo y sueldo
- 3 trabajadores, sancionados con 7 días de empleo y sueldo.
En total 10 trabajadores y representantes sindicales sancionados a los que se les culpa de reivindicar y luchar por un convenio colectivo digno para sus 430 trabajadores repartidos por todas las Islas Canarias.
Hay que recordar que la plantilla de Kalise llevan con el sueldo congelado desde el 2010, han tenido que soportar fuertes reestructuraciones como el ERE del 2013, y llevaban con el Convenio Colectivo vencido desde diciembre del 2018.
Desde entonces, los representantes sindicales y los trabajadores lo único que han hecho es instar a la empresa a sentarse a negociar un nuevo convenio, porque es algo insólito llegar al mes de septiembre y no haber constituido ni siquiera la Comisión Negociadora, encontrando en todo momento una negativa por parte de la empresa.
Cuando parecía que la cordura y el sentido común se iban a imponer, puesto que ya había fijada una reunión para el 17 de septiembre con objeto de iniciar las negociaciones, en la mañana del día 16 Kalise convoca a estos 10 trabajadores para comunicarles el contenido de su sanción, a todas luces, injusta y desproporcionada.
Con la firme voluntad de cumplir el objetivo de negociar un nuevo Convenio Colectivo, desde la Unión Sindical Obrera (USO), a pesar de los ataques sufridos, no vamos a boicotear esta reunión, asistiremos, pero trasladaremos que, para iniciar la negociación del Convenio Colectivo, y que ésta se produzca bajo el principio de buena fe, los trabajadores despedidos deben ser inmediatamente readmitidos y todas las sanciones planteadas deben quedar sin efecto.
Según las informaciones recibidas, la empresa Kalise es conocida en las Islas Canarias y en toda España por su modelo empresarial arcaico y dictatorial. En este proceso, han querido hacer gala de su merecida reputación y parece haber desempolvado las viejas recetas franquistas y preconstitucionales tratando de vulnerar el derecho a la negociación colectiva y el derecho a la huelga, pero ahora dan un paso más pretendiendo avasallar a sus representantes sindicales, vulnerando también el Estatuto de los Trabajadores y su propio Convenio Colectivo, en los artículos 42.1 5a), 43.4 y 44.1, donde además de actuar de manera unilateral impiden que pueda tramitarse un expediente contradictorio, a través del nombramiento de una comisión instructora.
Despedir y/o sancionar a representantes sindicales por ejercer sus funciones de convocatoria, información y representación, o a trabajadores por participar en las movilizaciones convocadas para desbloquear el conflicto y conseguir un Convenio Colectivo digno, supone uno de los mayores atentados democráticos y de represión sindical de nuestra historia, que escapa de siglas sindicales. Por ello, tanto las organizaciones políticas y sociales, como el conjunto del movimiento sindical debieran ser una única voz y mostrar su incredulidad y el más firme rechazo ante estas prácticas antisindicales.
En este sentido, la Unión Sindical Obrera (USO) iniciará cuantas acciones legales considere oportunas para restituir los derechos y el daño ocasionado, a una plantilla y sus representantes sindicales que son un ejemplo de honradez, transparencia y sentido de la responsabilidad.