En la reunión celebrada en el día de hoy, la Federación de Industria de USO ha querido trasladar sus inquietudes en dos sectores estratégicos para la industria de este país como son el sector energético y el del automóvil.
Una delegación de FI-USO, encabezada por Pedro Ayllón, Secretario General; Raúl Montoya, Secretario de Acción Sindical de FI-USO; Nuria Garrosa, Secretaria General de USO-PSA y Carlos Padilla, Secretario de Organización de USO-Iberdrola, han trasladado sus reivindicaciones a Hugo Morán, Secretario de Estado de Medio Ambiente, en un encuentro que en palabras de Pedro Ayllón “debería ser periódico y estable”.
La reunión versó sobre el impacto de dos modificaciones legislativas: el RD 20/2018 y el Anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética, y las consecuencias que puedan derivarse de su aplicación en el empleo.
“España es el 8º productor de vehículos del mundo y el 2º europeo, por ello, cualquier medida que se quiera aplicar debe ser progresiva, ordenada y justa” subrayó el propio Ayllón.
Reuniones de este tipo ponen de manifiesto el grado de responsabilidad de la USO, en esos términos se pronunció Nuria Garrosa “queremos mantener esta vía de comunicación para trasladar nuestras propuestas. El sector del automóvil en España no puede seguir siendo “un gran taller”. Debemos exigir que se garanticen inversiones en las plantas productivas, que se habiliten más dotaciones para centros en I+D+I y que las administraciones ganen terreno en las decisiones de las empresas matrices como está pasando en otros países de nuestro entorno que sitúen a las plantas españolas en una posición más competitiva”.
Raúl Montoya añadió “el Gobierno no está para generar incertidumbre, sino certezas y estabilidad, sobre todo en materia de empleo, una reconversión industrial debe ir acompañada del necesario consenso por todas las organizaciones sindicales, sin exclusiones”.
En palabras de Carlos Padilla, “desde la FI-USO seguiremos insistiendo y trabajando en desarrollar una política industrial que genere riqueza y empleo, apostando por una política energética que nos permita competir en igualdad de condiciones con los países de nuestro entorno y por el fortalecimiento y la consolidación del conjunto de los sectores industriales de nuestro país”.