Tras sendas reuniones entre las federaciones de Industria de los sindicatos presentes en los comités de empresa de Zona Franca y Montcada, y de los propios comités con la dirección europea de Nissan, los trabajadores de la firma japonesa “siguen sin tener una solución de futuro a la falta de producción de las plantas catalanas. Nos han planteado una reducción de plantilla de casi 600 personas y una inversión en la planta de pintura, pero no avanzan en la principal demanda que tenemos los trabajadores de Nissan, que es adjudicar a Barcelona algún nuevo modelo que ponga las fábricas a pleno rendimiento y garantice el empleo a futuro”, manifiesta Pedro Ayllón, secretario general de la Federación de Industria de USO.
Por un lado, señala Ayllón, “nos piden esfuerzos, negociar salidas pactadas, haber aguantado años de sacrificios salariales y jornadas, pero no cumplen con los compromisos productivos que aseguren el empleo; es decir, no vemos sobre la mesa un plan sólido a futuro. Ampliar la planta de pintura para cumplir con la legislación medioambiental a partir de 2022 es una mínima parte de lo que necesitamos para potenciar el empleo a medio y largo plazo”.
Las plantas de Zona Franca y Montcada siguen inmersas en un bache de baja producción “y no se concreta ninguna estrategia de futuro a pesar de las reiteradas peticiones que le hemos trasladado a la compañía para que presente un plan industrial y una hoja de ruta sobre cómo afrontar los cambios a los que se está viendo sometido el sector del automóvil. Esta falta de planificación, a su vez, tiene repercusiones en las empresas auxiliares y, en general, en el parque industrial de Barcelona, por lo que esperamos que no solo la empresa comience a tener proyectos serios para Cataluña, sino también todas las administraciones implicadas”, añade Enrique Saludas, secretario general de Sigen-USOC en la planta de Zona Franca.