USO, CGT y UGT han firmado un convenio que garantiza además que las condiciones laborales se mantengan y las económicas mejoren anualmente
El comité de Cerealto Siro Foods firmó ayer un convenio de tres años de duración que obliga a la empresa a mantener sus 370 puestos de trabajo.
Los representantes sindicales de USO, CGT y UGT, que han llevado toda la negociación de forma unificada, también han conseguido garantizar que las condiciones laborales de las que disponían hasta ahora se mantienen y las económicas mejoran. CCOO, que también forma parte del comité de empresa, no participó en la rúbrica.
Cabe destacar que con el nuevo acuerdo, el salario aumentará un 2% anualmente, se conservarán los trienios por antigüedad, los horneros obtendrán de manera automática la categoría de oficial de primera y la jornada laboral será de 1.760 horas. Igualmente se logra mejorar en el plus de los sábados, domingos y festivos. Además, cada hora que se adelante la entrada en el turno para realizar las tareas necesarias previas al inicio de la fabricación, actualmente el lunes o día posterior a un festivo a las 6 de la mañana, será retribuida con otra extra.
Los mismos sindicatos también firmaron hace unas semanas un nuevo Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) trienal en el que se acordó que en el transcurso de los tres años, la empresa no puede realizar ningún Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción ni despidos, únicamente disciplinarios. En caso de que se lleven a cabo será por acuerdo y las indemnizaciones corresponderán a 45 días con un máximo de 42 mensualidades. «Estamos contentos con lo que hemos conseguido, garantizamos una seguridad al personal y eso es lo más importante», manifiestan desde los sindicatos.
Cerealto, que compró a Siro en 2017, se fusionó con la misma el año pasado y la nueva compañía, Cerealto Siro Foods, anunció que venderán sus cinco fábricas de bollería y pan.
Por el momento se desconoce el futuro de la planta briviescana. Fuentes sindicales afirman que saben que hay «posibles compradores » y que incluso alguno de ellos «ha visitado la planta ». No obstante, hasta que no se produzca la venta definitiva, «no transcenderá ningún tipo de información», afirman.
En su día, Mercadona, principal cliente de estos negocios, asumió el compromiso de dar continuidad a los negocios de pan y bollería en Briviesca.
La venta de esta factoría será la tercera desde que Repostería Martínez fuera enajenada al grupo Bimbo en 1999, para posteriormente adquirirla el Grupo Siro en 2009 y en mayo de 2017 por Cerealto, que también compró la planta de Antequera. Esta planta es una de las principales dentro del polígono industrial La Vega.
(Fuente: Diario de Burgos, Digital)