La filial española de embalaje flexible cesará su actividad industrial de manera inminente y dejará en la calle a 109 familias.
Mondi Group multinacional fabricante de productos derivados de papel y embalaje flexible, ha anunciado el cierre de la planta situada en Polinyà (Barcelona) de la división de embalajes flexibles, dejando en el paro a 109 trabajadores.
El lunes día 23 de febrero, la dirección general de Mondi Packaging Ibérica anunciaba al Comité de Empresa su intención de cesar todas sus actividades fabriles en la planta barcelonesa, debido a la falta de confianza de los inversores.
La empresa, en plena capacidad productiva cesará sus actividades al término del plazo de negociación marcado por la ley (30 días naturales, a finales de marzo) y dejará sin empleo a la totalidad de los 109 trabajadores de la planta del Vallés Occidental.
El grupo, con más de 26.000 trabajadores a nivel mundial, adquirió en 2012 el 93,4% del accionariado del grupo industrial Nordenia International A.G. a Oaktree Capital, con la intención de expandirse en el mundo del embalaje flexible. El grupo anunció un beneficio operativo subyacente de € 699 millones en 2013.
El cierre de la planta viene derivado por una nefasta gestión en los últimos años, ya que en el año 2014 la empresa sobrepasaba su capacidad productiva, subcontratando incluso la fabricación a empresas del sector.
Pese a la saturación productiva y el acuerdo pactado con los trabajadores de una reducción salarial del 6,6% (equivalente a una paga) y el despido pactado de 14 trabajadores, las medidas tomadas por la antigua directiva formada por el alemán Frank Stern (director general) y Antonio Ogalla (director financiero), abocaron a la empresa a la situación actual, derivando toda la producción a las plantas de Europa del este, algunas de muy reciente adquisición, con la ‘burda’ explicación de que esas plantas están infrautilizadas.
Después de despedir con indemnizaciones millonarias a la antigua directiva de la planta de Polinyà a finales del pasado año 2014, el actual director general, el austríaco Ronald Pfeifer, anunciaba la noticia del cierre a los representantes de los trabajadores después del beneplácito de la administración general de la división en Viena.
La empresa, en plena capacidad productiva durante los primeros meses del año 2015, cesará sus actividades al término del plazo de negociación marcado por la ley (30 días naturales que finalizan el 31 de marzo) y dejará sin empleo a la totalidad de los 109 trabajadores de la planta del Vallés Occidental.
Este cierre en Barcelona se une al que el grupo multinacional realizó en 2008 para su planta de Cogullada (Zaragoza) y los más recientes en las plantas de su división de papel de Anzola dell’ Emilia (Italia) y de Lohja (Finlandia) programada para el 30 de julio del presente año, según datos del portal aspapel.es.
