La Cooperativa Agropecuaria anunció el pasado 22 de abril un expediente de regulación de empleo alegando que la empresa sufría dificultades económicas.
Después de un período de negociaciones, en el que se han celebrado tres reuniones, la postura de la cooperativa frente a sus trabajadores no ha cambiado y se limitará a ofrecerles lo estipulado por ley, a pesar de la concentración que se llevó a cabo frente a la sede en Meirás (Ferrol). “Vamos a trasladar el asunto a los juzgados e iniciar un procedimiento de conflicto colectivo, y algunos trabajadores también presentarán demandas por su cuenta””, explica Francisco Cousillas, responsable de la Federación de Industria de USO Galicia.
Las últimas actuaciones de la cooperativa parecían algo incoherentes ya que había recibido una inversión de casi 1,5 millones de euros y había aumentado la plantilla en los últimos años. Esto, sumado a la falta de documentación actualizada, ha llevado a que los empleados pidan responsabilidades por la gestión, a lo que Copagro ha respondido que “ellos no saben de cuentas, eso lo lleva el gerente”, transmite Cousillas.
Los contratos acabarán el 31 de mayo y Copagro quedará oficialmente cerrada.