Tras la quinta reunión entre empresa y representantes de los trabajadores de las plantas asturianas de ArcelorMittal, quedó patente el total desacuerdo de cara al Acuerdo Marco por las posturas enfrentadas que ambas partes vienen defendiendo durante toda la negociación y, por ello, el comité propone convocar dos días de huelga para los próximos 23 y 27 de abril. Las plantillas decidirán en asambleas si quieren secundar los paros. El resultado definitivo se conocerá el martes.
Los mayores puntos de fricción se encuentran en materia de salarios y de contratación. En el caso de los salarios, la multinacional siderúrgica ofrece un irrisorio 0,4% de subida, frente al 4% que pide la representación sindical conformada por USO, UGT y CCOO. “La empresa no solo burla los esfuerzos de congelación y recortes a los que la plantilla accedió durante los años de crisis para mantener el empleo, sino que no se acerca ni siquiera a lo pactado en el IV AENC”, resume Segismundo Lorenzana, secretario general de la sección sindical de USO-Arcelor. Esto, además, nos reafirma en nuestra posición de la total invalidez de estos acuerdos, que ni siquiera sus firmantes están dispuestos a cumplir.
Si los trabajadores deciden finalmente ir a la huelga, los comités de las plantas de Avilés y Gijón-Veriña buscarán el respaldo del resto de plantas españolas de Arcelor para que la huelga vaya más allá de las factorías asturianas.
Preacuerdo en las auxiliares
En cuanto al sector de las auxiliares de Arcelor, ayer se alcanzó un principio de acuerdo en el Sasec, servicio de mediación del Principado, del cual “no podemos dar aún muchos detalles, ya que aún faltan tres empresas por ratificarlo. Si todos estuvieran de acuerdo, aparcaríamos la opción de seguir con las movilizaciones”, avanza Luis Manuel Díaz, secretario de Acción Sindical de FI-USO Asturias.